Jornada turística-ecológica con estudiantes de diferentes regiones de Colombia, ya que este país quiere implementar el turismo rural, debido a que aumenta paulatinamente el nivel de vida y la inseguridad ha sido erradicada.La Jornada turística-ecológica con el grupo de colombianos fue mutuamente fructífera, aunque solo duró unas cinco horas; nosotros aprendimos con ellos y éstos se fueron contentos, al sentir que esta actividad en Pampaneira, había puesto la guinda a su viaje a España, al encontrar un modelo de servicios turísticos cercano a sus intereses y sobre todo sus posibilidades.
El programa era muy extenso y se realizó completo e incluso Pampaneira, como centro comercial abierto, se mostró el lugar ideal para que ellos pudieran gastar la plata que traían desde Colombia, ya que la actividad en España ocupaba todo el día y a las doce de la noche, en el pueblo de Mijas, todos los comercios estaban cerrados.La actividad en Pampaneira comenzó con el encuentro en la puerta del Centro de interpretación gastronómico Alpujarra del grupo de desinteresados guías que nos habíamos reunido con el objetivo de mostrar el tejido turístico creado en los últimos treinta y cinco años, para ello las actividades realizadas fueron:
- Paseo por el pueblo
- Visita al Hotel Rural Estrella de las Nieves
- Paseo por los huertos que rodean al pueblo
- Comida tradicional alpujarreña en el restaurante Ruta del Mulhacen
- Charla coloquio sobre Agricultura ecológica con Alberto Hortelano, director de la escuela de Agricultura ecológica de Pampaneira.
El grupo de guías estaba formado por Paco Pérez, una de las personas más mayores del pueblo y que posee muchos conocimientos sobre tradiciones, historias y de campo; su hijo Antonio Pérez y Francisco Agustín (Perren) que representan la generación actual de agricultores y que tienen la misión de conservar y transmitir a los más jóvenes sus experiencias.
El trabajo de los guías resultó de lujo, tanto que parecíamos un equipo profesional y ellos resaltaron la sencillez, la buena disposición y la interactuación con el grupo, que en todo momento se sintieron relajados y como en familia.
El día amenazaba lluvia que justo empezó a precipitarse al final del paseo otoñal, entre castaños, nogales, encinas... un paseo dorado que tiene mucho encanto. para el grupo de colombianos todo era novedoso y lo recibian como un regalo de la naturaleza. ¡un paseo muy placentero!
Todavía les quedó tiempo para hacer las compras y ver in situ, los diferentes comercios turísticos que pueblan Pampaneira y despues a degustar una rica comida tradicional de la Alpujarra que comieron con verdadero gusto.
La charla con Alberto transcurrió de una forma amena , fluida y muy participativa entre sorbo y sorbo de un oloroso café de la casa, 100% colombiano y unas tisanas de menta-poleo; el coloquio hubiera continuado por parte de todos pero Carmen, la coordinadora del grupo, tuvo que poner fin al encuentro para seguir cumpliendo los diferentes compromisos.
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