Los espacios

La obra de creación del Centro de interpretación de gastronomía de la Alpujarra avanza y aunque la lluvia no permite mucho trabajar en los exteriores ya hay cambios en la fachada principal que aumenta su aspecto rústico.

En el techo del balcón de la 1ª planta se han puesto vigas con alfangías de castaño y losas de pizarra. En la pared Rafa ha plasmado su arte con una reproducción de piedra del terreno.

Los espacios empiezan a mostrarse, con las nuevas estructuras metálicas han variado algunas medidas respecto a los planos y hay que adaptar los usos al espacio existente. La estructura del ascensor recorre el edificio desde la planta baja hasta la segunda.

En la primera planta hay una taberna para degustar vinos y tapas, esperar la mesa y comprar comida para la casa o comerla en el campo. Desde las ventanas se ve la entrada del pueblo y desde los balcones contemplar el bullicio de gente o la soledad de los días de lluvia en invierno.

También la cocina setá en el primer piso y al fondo las escaleras de camareros para subir al comedor que está en la 2ª planta.

La subida de la comida se hace por una escalera que sube desde la cocina, al lado vemos el pilar donde se apoyará la estructura del montaplatos.

Y el servicio de mesas se atiende desde esta zona, cerca de la terraza, a la espalda las ventanas miran a la iglesia y a los pueblos del barranco.

El comedor está en la 2ª planta, queda un espacio amplio y muy agradable con ventanas al pueblo y a la montaña.
Los espacios ya están definidos y llega el momento de montar las instalaciones de electricidad, de climatización, de ventilación y los sistemas de seguridad, así que ya hay que decidir como va las instalaciones de cocina y diversos temas de interiorismo que van ligados a esta fase de la obra.

La semana que viene tenemos diversas reuniones con distintos asesores para ir cerrando temas de maquinaria y otros de situación definitiva de ventanas, etc.

Una semana, esta que entra, muy entretenida y en la que vamos a necesitar una dosis extra de energía que estamos seguros recibir del universo.